viernes, 27 de marzo de 2009

Festival Internacional de Cine Independiente de Buenos Aires, BAFICI 2009


Mónica Delgado empieza su cobertura del BAFICI 2009 que empezó el miércoles 25.

Un repaso a las películas vistas en la primera jornada del festival, entre óperas primas, ganadoras en la Berlinale y rarezas:

- Alle Anderen. Esta cinta de la alemana Maren Ade, que fue ganadora del Oso de Plata junto a la uruguaya Gigante, muestra el devenir cotidiano de una pareja y sus inseguridades durante sus vacaciones en Cerdeña, con un ritmo lánguido y sin desbordes dramáticos.

Ade es una excelente directora de actores, sabe cómo obtener lo mejor de ellos en una historia sin muchos conflictos o tensiones, donde las diferentes acciones como leer, ir de compras, cocinar o conversar antes de dormir se convierten en momentos vitales en los gestos de sus protagonistas. La diferencia de la película de Ade con otras cintas sobre el desgaste o recomposición de relaciones amorosas es que ella se centra en las sutilezas, ya que sus personajes están a la caza de detalles que sirvan como demostraciones de afecto mutuo y que a veces tardan en llegar. El arquitecto Chris (Lars Eidinger) y su novia Gitti (Birgitt Minichmayr) están en una isla de vacaciones, pero pendientes de que él pueda ganar un concurso de diseño. Durante su estancia, Gitti suele increpar el idealismo e inmovilidad de su novio ante eventos laborales y personales, mientras se cuestiona a sí misma ser demasiado diferente para él, pues ella se muestra explosiva, creativa y vivaz. Sus pequeños dilemas se ven exacerbados tras el encuentro con Hans, amigo del novio, quien junto a su pareja Sana, se convierten en una suerte de antiespejo, mostrándose como una pareja perfecta: adinerados, ella, embarazada y él, un empresario exitoso.

Alle Anderen se sostiene sobre todo en la actuación de Birgitt Minichmayr, que también fue premiada en la Berlinale. Un momento interesante: Chris bailando teatralmente una canción de Julio Iglesias y Willie Nelson, de antología. Compite en el BAFICI en la selección oficial internacional.

- El brau blau. El catalán Daniel Villamediana nunca nos muestra el toro azul del título (en catalán) en su ópera prima. A través de un estilo seco, basado en encuadres fijos que mantienen la distancia con el protagonista, un amago de torero obsesionado con la técnica de la tauromaquia, asistimos a un relato libre de diálogos, pero que por momentos deja escuchar fragmentos de alguna fuga de Bach. A pesar que suene paradójico, Villamediana sólo nos acerca al personaje a través de estos distanciamientos que van argumentalmente en orden progresivo: lo vemos andar por las calles de Barcelona para dirigirse a una corrida de toros, y al llegar sólo se escuchan los eufóricos Oleeee, oleeee de la multitud. Ese es el primer encuentro con su objeto de obsesión, para luego no volver a insinuarlo más.

El desarrollo del filme sucede en el campo, donde el protagonista emprende su tarea: prepararse en los mecanismos del toreo, leyendo a la vez a García Lorca, comiendo pan y queso, y curándose una herida en una pierna. El personaje cojea y eso nos deja la impresión de varias cosas: es un ex torero que optó por el alejamiento o es un amateur obsesivo de un modo casi perverso (una escena lo muestra sobre la cama intentando introducirse en varios partes del cuerpo unos cuernos de mentira). El protagonista permanece en un total estado de ermitaño, convirtiéndose así en una alegoría: el hombre alejado del animal, tratando de elevar a lo supremo la praxis del toreo. Siempre he detestado las corridas de toros, por lo tanto agradezco no ver a ningún ejemplar que fuera la comidilla de los amigos de los animales, sin embargo, el primer largo de Villamediana, quien también es crítico de cine de la revista española Letras de cine, que ahora sólo sale de manera virtual, elabora una tesis sobre la búsqueda de la perfección en la técnica pura, logrando una abstracción inusitada. En el BAFICI es proyectada dentro la sección Cine del futuro.

- Blind pig who wants to fly. Lamentablemente vi el debut de Edwin (así a secas), un joven cineasta indonesio, con diez minutos menos debido a un problema con las colas de repartición de boletos para las funciones para la prensa. Pero de hecho que se trata de una obra que requiere una segunda visión, pero me atrevo a dar mis primeras impresiones. El filme se desarrolla en la Yakarta actual, pero acude a saltos de tiempo que nos ubican en los tiempos de la caída de Suharto, en 1998. Edwin intenta con su filme ser un reflejo de los problemas que pasan, o pasaron, los habitantes de sus islas: la inmigración china, la lucha cultural entre musulmanes, católicos o budistas, la crisis política, pero todo teniendo como leit motiv una canción que no tengo ganas de volver a escuchar por lo menos de aquí a unos treinta años: I just called to say I love you de Stevie Wonder. Un total abuso, sin embargo, a pesar de esa melodía machacona que escuchamos de diferentes maneras (a modo de karaoke, cantada en una versión de concurso tipo American Idol, en covers, a capella, etc.), Edwin entrega una propuesta interesante como para conocer algo del cine indonesio, pero nada más.


Blind pig who wants to fly es la historia de casi una decena de personajes (unos vistos de niños y luego ya adultos), donde se habla de la inocencia, de las opciones sexuales, de las supersticiones y que se hilan de vez en cuando con la metáfora del chancho del título, haciendo la alegoría demasiado explícita. Un viejo dentista ciego, una esposa casi muda, una nieta motociclista que pasea con su novio por las calles de Yakarta, una pareja gay que de vez en cuando complace al dentista, y la novia enfermera y musulmana de éste que desea tener un hijo del anciano y cantar en Planet Idol son los personajes de esta historia que tiene sus mejores momentos en el relato infantil de la nieta y su amigo chino. Esta cinta fue premio FIPRESCI en el último Festival de Rotterdam, y en el BAFICI compite en la selección oficial.

- Material. Como señala el título estamos ante imágenes primarias, que dan la impresión de estar apenas editadas, es decir, escenas y secuencias grabadas por diferentes camarógrafos y en distintas épocas con estilo noticioso o periodístico, o simplemente para documentar momentos a finales de la década del ochenta, en los preludios y durante la caída del muro de Berlín.

De eso se trata Material, filme de Thomas Heise, quien recopiló diversas imágenes de episodios históricos para luego engranarlas en esta suerte de documental pero que visto con los ojos del tiempo se vuelve en una reconstrucción de un tema común en todas las situaciones que presenta: la imposibilidad de crear una Historia que empiece de cero. Como señala una parte de la cinta, Heise propone que la Historia no puede interpretarse como una serie de hechos lineales sino acumulativos y en desorden. En el filme vemos fragmentos de ensayos de la puesta teatral de Germania Tod in Berlin, de Heiner Müller, mítines y manifestaciones en Alexanderplatz a finales de 1989; las declaraciones de la policía de una cárcel en Brandemburgo, así como de los presos que piden amnistía y algunas tomas de la partida de defunción de la RDA. El director presentó el filme, que pertenece a la sección La tierra tiembla, y pidió paciencia a los espectadores, ya que su cinta dura 166 minutos.

- Nick & Norah’s infinite playlist. Peter Sollett es el director de Raising Victor Vargas, que no estaba mal, pero esta vez centra su película en un grupo de muchachos durante toda una noche dentro de Nueva York, con un estilo diferente, ya que nos introduce en el terreno de la comedia romántica. Es la típica historia de teens pero que tiene tantos elementos divertidos e irónicos que la hacen una película entrañable: Michael Cera es un bajista que está decepcionado tras el rompimiento con una colegiala popular, pero cuyo mundo se ve remecido por la llegada de una chiquilla millonaria pero sin tanta suerte en el romance (Kat Dennings). Ambos, tras una serie de entreveros, buscan una tocada sorpresa de su banda musical favorita Where’s Fluffly, a ritmo de Shout out louds, Vampire weekend o Band of horses.

Michael Cera parece que fuera el típico antihéroe de las películas de adolescentes, tal como se le ve en Supercool o Juno, pero aquí su fama de nerd se viene abajo y queda como un chico decidido pero de perfil bajo. Sollett recrea con no poca gracia las noches juveniles neoyorkinas, y lo hace a través de personajes hilarantes como un grupo de punk gay que busca nombre para la banda, una amiga ebria que es capaz de sumergirse en el water para sacar un chicle o una ex novia celosa que hace un striptease con You sexy thing de Hot chocolate. Refrescante en medio de tanta densidad.

- Damned if you don’t. Es la primera vez que veo algún trabajo de la estadounidense Su Friedrich y lo hice a través de esta cinta de 42 minutos de 1987, que contiene fragmentos de Narciso negro de Michael Powel y Emeric Pressburger, comentados por la actriz principal, y que son recontextualizados en un relato lésbico de monjas. El filme de 1947 cuenta precisamente la represión sexual de un grupo de monjas en un convento en el Tibet. Es interesante cómo la cineasta va hurgando sobre un tema vital al parecer en su filmografía: la contención del deseo o su demanda, desde un caso extremo como lo es la vida asceta de una religiosa, que poco a poco va cediendo a la liberación. Friedrich lo hace por momentos sin necesidad de audio, sólo mostrando escenas casi oníricas en blanco y negro de la monja metida en un acuario, viendo nadar a mamíferos acuáticos de formas fálicas. Se oye a Patti Smith en los créditos finales. Esta obra pertenece a una retrospectiva de Friedrich, donde se proyectan 15 trabajos entre cortos y mediometrajes experimentales, inspirados en las vanguardias de los años 60 y 70.


Mónica Delgado

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mónica, manda crónicas seguido para estar enterados. No te vayas a cansar como le pasa aLeón.

Rosa Elisa Chávez Yacila dijo...

Mmmm sí, también quería saber de las otras películas ganadoras en el festival. Gracias.

Anónimo dijo...

Sádica Mónica porque sabes que no las veremos ni en Polvos. Trae algunas de esas pelas anunque sea en dvd y las prestas a tus patas